
El melanoma es una de las formas más mortales de cáncer de la piel. Esto se debe principalmente a que se propaga más agresivamente que otros cánceres de la piel. Si bien el melanoma representa solo el 1% de cánceres de la piel, este tipo causa un número alto de muertes por cáncer.
Puesto que se disemina tan rápidamente, el melanoma es difícil de tratar en una forma eficaz una vez que se ha propagado en el cuerpo en los ganglios linfáticos y otros órganos.
Los melanomas de etapas tempranas usualmente se tratan con cirugías para remover las células cancerosas. Sin embargo, el tratamiento para casos más avanzados de melanoma podría incluir inmunoterapia, que es un tratamiento que activa tu sistema inmunológico para combatir las células cancerosas.
Aquí encontrarás lo que debes saber sobre la inmunoterapia para el melanoma.
La inmunoterapia ayuda al sistema inmunológico del cuerpo a reconocer de mejor forma y a combatir las células cancerosas. La inmunoterapia puede funcionar de varias formas diferentes contra el melanoma:
Aquí examinaremos más de cerca cada tipo de inmunoterapia contra el melanoma.
En teoría, el sistema inmunitario del cuerpo puede reconocer y atacar células cancerosas para prevenir su propagación. Pero a veces las células cancerosas pueden propagarse demasiado rápido para que el sistema inmunitario mantenga el paso, o las células podrían incluso esconderse o atacar el sistema inmunitario. La inmunoterapia general usa medicamentos que pueden ser útiles para mejorar la función general del sistema inmunitario. Por ejemplo, las interleucinas son proteínas que estimulan el sistema inmunitario para que pueda reconocer y atacar de mejor forma las células de melanoma. El tratamiento contra el melanoma usa versiones hechas en laboratorios de la proteína interleucina-2 (IL-2).
Las IL-2 no se usan tan frecuentemente como se solían utilizar porque pueden tener efectos colaterales graves y comúnmente no funcionan tan bien como los inhibidores de puntos de control inmunitarios.
Los inhibidores de puntos de control inmunitarios (IPCI) son un tipo dirigido de inmunoterapia. Una forma clave en la que la inmunoterapia funciona con el melanoma es “desactivando” proteínas específicas en células inmunitarias que hacen que estas células dejen de atacar al cáncer.
Para una persona saludable, el sistema inmunitario tiene “puntos de control” integrados que evitan que las células inmunitarias destruyan células saludables. Desafortunadamente, las células de melanoma usan esos puntos de control contra el cuerpo y pueden enlazarse con ellos para permitir que el cáncer se propague. Los inhibidores de puntos de control inmunitarios son medicamentos que “desactivan” esos puntos de control específicos, permitiendo que las células inmunitarias identifiquen el melanoma y trabajen para destruirlo.
Los inhibidores de puntos de control son un desarrollo prometedor para el tratamiento del melanoma. Antes de los tratamientos con IPCI, la tasa promedio de supervivencia con melanomas avanzados era solo seis meses. Ahora, sin embargo, las tasas de supervivencia han excedido ampliamente la tasa de seis meses.
Los linfocitos T son un tipo específico de células inmunitarias que el cuerpo usa para combatir el cáncer. Cuando se mueven hacia un tumor, se denominan linfocitos infiltradores de tumores (TIL, por sus siglas en inglés). La terapia de TIL es un tratamiento contra el cáncer más nuevo mediante el cual se remueven los TIL de un tumor, se multiplican en un laboratorio y se transfieren al cuerpo mediante una infusión. Los TIL pueden ser efectivos contra melanomas avanzados porque los linfocitos T que se extraen de las células cancerosas han “aprendido” a reconocer específicamente el melanoma.
El tratamiento es complejo y se proporciona en varios pasos en el hospital. En 2024, la Administración de medicamentos y alimentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó lifileucel (marca: Amtagvi) como la primera inmunoterapia aprobada por la FDA de linfocitos T derivados de tumores.
La viroterapia oncolítica implica “controlar” virus para que ataquen específicamente células cancerosas. Los virus son notorios por su capacidad para esconderse del sistema inmunitario y atacar células saludables, así que los científicos descubrieron un método para aprovechar ese poder alterando virus (denominados virus oncolíticos) en un laboratorio para que en vez de eso ataquen células cancerosas.
Además de destruir células cancerosas directamente, los virus oncolíticos también pueden alertar al resto del sistema inmunitario para que ataque células cancerosas. En lo que se refiere al melanoma, talimogene laherparepvec (marca: Imlygic), también conocido como T-VEC, es un virus oncolítico que puede usarse para tratar de encoger tumores que no pueden extraerse quirúrgicamente. Actualmente, el objetivo principal de la viroterapia oncolítica para el melanoma es encoger los tamaños de los tumores y algunos datos muestran que podría ser útil para incrementar las tasas de supervivencia.
Muchas de las opciones de tratamientos de inmunoterapia para el melanoma pueden usarse en conjunto, lo cual proporciona más oportunidades para un tratamiento efectivo. Más opciones de inmunoterapias proporcionan nuevas esperanzas para un tipo de cáncer muy difícil.
Los mejores desenlaces clínicos de los tratamientos siempre ocurren con diagnósticos tempranos, así que conocer las señales de cáncer de la piel y someterse regularmente a evaluaciones de la piel es muy importante para la lucha contra el melanoma.
Este recurso educativo se preparó con el apoyo de Merck.